La cantata Cessate, omai cessate, RV 684, de Antonio Vivaldi data de alrededor de 1727 o 1728. Se trata de una lamentación por un amor perdido, estructurada en dos pares de recitativos y arias da capo, típica de las cantatas del final del siglo XVII y principios del XVIII. El texto es anónimo y solo se conoce a través del manuscrito autógrafo de Vivaldi. Describe el sufrimiento de un amante abandonado, implorando que cesen los recuerdos crueles de un “affetto tiranno” (amor tiránico), y menciona a Dorilla como la figura ingrata y despiadada. El narrador, afligido, resuelve vengarse en las orillas del Aqueronte, invocando la muerte como consuelo.Un texto similar aparece en un aria de la ópera de Vivaldi L’incoronazione di Dario (1717), con versos como “Cessa tiranno amor di tormentarmi più”, lo que sugiere una posible inspiración o reutilización.
La trama es convencional pero completa: el cantante decide suicidarse, se prepara para la muerte y se imagina como una sombra vengativa. El contenido mezcla ferocidad y compasión, dirigido tanto a los “recuerdos crueles” como al “corazón herido y abandonado”. La letra enfatiza la crueldad de Dorilla, reforzada musicalmente por unísonos instrumentales.
Bajo el hermoso techo de cristal del Cour Marly del Louvre, el violinista y director Julien Chauvin dirige Le Concert de la Loge en una exquisita muestra de excelencia musical. En este entorno etéreo, vigilado por magníficas esculturas, la orquesta parisina de época interpreta un elegante programa de obras de Vivaldi y Mozart que destaca las brillantes capacidades de las cuerdas y las voces barrocas y clásicas. A los músicos se unen la mezzosoprano franco-suiza de talla mundial Marina Viotti y el violista principal de la Filarmónica de Berlín, Amihai Grosz. (Tomado de Medici.tv)
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